Page 82 - Tecnicas de Terapia Cognitiva R Leahy
P. 82
Evaluación De los Pensamientos y Comprobación de su Validez
curran varios meses hasta lograr la meta deseada. El terapeuta puede ayudar al paciente a eva-
luar si la “meta final” es el único beneficio importante y a considerar la posibilidad de “hacer
progresos” o “practicar la autoayuda” como objetivo positivo, intermedio y diario. El paciente
suele tener la idea de que estas “ganancias admisibles” son limitadas, y por ello los costos le
parecen mucho más altos.
Por último, muchos individuos con depresión y ansiedad no se comprometen totalmen-
te con esta técnica, y si se topan enseguida con algún costo, simplemente la abandonan
o renuncian. Este tipo de comportamiento será analizado en mayor detalle más adelante
(véase capítulo 5); por ahora, es importante recordar que al proporcionarle al paciente más
argumentos motivacionales, se lo puede ayudar a flexibilizar su búsqueda de una conducta
más adaptativa.
Preguntas a Formular/Intervención
“Ya ha identificado los costos o beneficios de su pensamiento, pero me pregunto si se está
focalizando en los resultados a corto plazo más que en la recompensa a largo plazo. Si pensara
hacia más adelante, ¿cuál sería la posible ganancia? A veces, los beneficios tardan en acumu-
larse. No se trata de pensarlos en términos de todo o nada o de su inmediatez. Si asumiera una
conducta positiva y la sostuviera en el tiempo, ¿podrían cambiar los beneficios?
“Además, a menudo descubrimos que no somos tan buenos a la hora de predecir cómo nos
sentiremos con el tiempo. Me pregunto si Ud. ha notado que en el pasado frecuentemente va-
ticinó hechos negativos, que finalmente resultaron neutrales o positivos. ¿Es posible que tenga
un sesgo negativo sobre sus sentimientos en el futuro?”
Ejemplo
T: Cuando describió los costos y beneficios de reunirse con sus amigos, parecía focalizado
en sentirse mal ante la mera idea de verlos y pasar un momento incómodo. De modo que
se inclina por no verlos. Sin embargo, me pregunto si no se está centrando demasiado en
los costos y beneficios inmediatos, en vez de considerar las recompensas a largo plazo.
Por ejemplo, si llevara una vida más activa— visitando amigos, haciendo ejercicio, salien-
do y haciendo cosas—los réditos se irían acumulando con el tiempo.
P: Bueno, supongo que pienso que me sentiría extraño reuniéndome con mis amigos cuan-
do me siento tan deprimido.
T: Sí, puede ver que ello lo haría sentirse incómodo. No obstante, a veces, cuando pensamos
en los costos de algo, nos centramos en las consecuencias inmediatas. Por ejemplo, ¿al-
guna vez ha pensado, “Si voy al gimnasio, después me voy a sentir agotado,” pero luego lo
hizo y se dio cuenta que se sentía mejor después de entrenar?
P: Sí, eso me ha pasado. Me cuesta mucho motivarme.
T: Quizás, cuando piensa en los costos de hacer algo, primero piensa en los posibles resulta-
dos negativos, encuentra uno, cree que es el único que importa y luego decide no hacerlo.
La incomodidad al ver a sus amigos puede representar el costo inicial, pero, probable-
mente el beneficio de estar con ellos pueda percibirlo un poco más tarde. ¿Le ha pasado
alguna vez?
P: Puede que tenga razón. No lo sé. Supongo que cuando mis amigos y yo hablamos, me
siento menos deprimido.
T: Entonces, los resultados positivos llegan con el tiempo. Analicemos la idea de bajar de
peso. Si alguien se ejercitara solo una vez a la semana, seguramente no lograría los fines
81
Terapia cognitiva.indb 81 06/06/2018 12:04:02 a.m.